El restaurante del granero

De vuelta de San Sebastián hacia nuestra casa en Colmenar, paramos en El Parador de Argomaniz

El entorno es curioso ya que no hay población sino una urbanización de chalets. Las vistas son agradables ya que se domina lo llanura y se ve Vitoria a lo lejos (a una legua, podría ser). 

El sitio es agradable como todo parador: tienen un 'no sé qué' que te hace recordar buenos momentos.El edificio por fuera da la sensación de estar muy modificado y 'expandido' de manera bastante sensata ya que se percibe la construcción original, que notamos al saber que la casa perteneció a una familia noble aunque la austeridad está presente en el diseño. Por dentro es un parador… quedan algunos salones que recuerdan la estructura original y por la escalera se puede llegar al desván, formado por una estructura de madera que parece bastante antigua. La sala está modificada y hay unos ventanucos redondos a pie de suelo un tanto desconcertantes aunque bien integrados en el diseño moderno y en ella hay habilitado el restaurante: Aletegi Jatetxea. La sala está al estilo tradicional de restaurante y resulta un poco abigarrado para mi gusto.

La carta es corta (un menú inabordable), con algunas propuestas de medias raciones que aprovechamos para nuestro estilo de comida y más estándo en tránsito.
Buen vino (como ya es habitual en España).
Razonable servicio.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Bienvenido